CHISTE Nº 115
EL ALBAÑIL VAGO Y EL LABORIOSO
Estaban dos albañiles haciendo una obra, uno de ellos era muy vago, pues a veces, incluso de dormía, así que se quedaba abajo con la hormigonera, para que hiciese el cemento, y el otro, muy laborioso, se subía al andamio para poner los ladrillos.
Un día, el albañil vago se durmió, y el laborioso desde arriba le gritó:
PACO: Rodolfo, ¡¡¡PÁSAME EL CEMENTO!!!.
Y Rodolfo seguía durmiendo plácidamente sin escuchar nada.
Paco volvió a gritar:
PACO: Rodolfo, ¡¡¡QUÉ ME PASES EL CEMENTO!!!.
Y así una y otra vez, hasta que una de las veces, se agachó demasiado al gritar a su compañero, y cayó desde el andamio, justo al lado de Rodolfo.
Éste se despertó, y preguntó:
RODOLFO: Eh, ¿Qué pasa?. ¿Qué haces aquí abajo?.
Paco le respondió:
PACO: Rodolfo, ¡¡¡QUE SEA LA ÚLTIMA VEZ!!!...
¡¡¡QUE BAJO DEL ANDAMIO A POR EL CEMENTO!!!.
Nº 115
2 comentarios:
Jolín, menuda manera de bajar...,¡¡a toda prisa!! Jajaja
Besitos.
Hola Campoazul, la verdad es que bajó rápido, jajaja, no le hicieron falta escaleras, jajaja.
Saludos.
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