CHISTE Nº 167
Un chico de 18 años que se llama EVARISTO le pide a una chica si quiere ser su novia y ella acepta. Va a contárselo a su padre, y muy sorprendido, su padre le pregunta:
EULOGIO: ¿Y quién es la afortunada?.
EVARISTO: Es la hija de Juan, el carnicero.
EULOGIO: Lo siento mucho hijo, pero no puedes casarte con ella porque es tu hermana. Cuando yo era joven, tenía muchos problemas con tu madre, y yo tenía muchas amantes.
Al poco tiempo, EVARISTO consigue una nueva novia y va a contárselo otra vez a su padre, el cual le pregunta.
EULOGIO: ¿Y quién es esta vez la afortunada?.
EVARISTO: Es la hija del Antonio, el zapatero.
EULOGIO: Lo siento hijo mío, pero ella también es tu hermana. No puedes casarte con ella.
Después de unos meses, EVARISTO conoció a otra chica y fue a contárselo de nuevo a su padre.
EULOGIO: ¿Quién es la afortunada?.
EVARISTO: Es la hija de Manolo, el panadero.
EULOGIO: Lo siento hijo, pero ella también es tu hermana.
Evaristo se enfada mucho y va a contarle lo sucedido a su madre.
EVARISTO: Mamá, hace unos meses me hice novio con la hija de Juan el Carnicero, se lo conté a papá, y me dijo que no podía casarme con ella porque es mi hermana. Papá era el amante de la mujer del carnicero. Así que el mes pasado le pedí que fuese mi novia a la hija de Antonio el zapatero y me dijo que sí. Se lo conté a papá y me dijo que también es mi hermana. Y hoy la hija de Manolo el panadero, ha aceptado ser mi novia, pero al decírselo a papá me ha dicho que también es mi hermana.
MADRE: No te preocupes Evaristo, y cásate con la chica que más te guste de las tres, porque...
¡¡EULOGIO NO ES TU PADRE, ERES HIJO DEL FONTANERO!!!.